En este artículo te respondo a la eterna pregunta de: ¿por qué los niños duermen mejor la siesta en la guardería y con los abuelos que en casa?
Las 3 razones por las que los abuelos son los reyes de la siesta:
1. Entorno y ambiente:
Los hogares de los abuelos suelen ser lugares más tranquilos y silenciosos, con menos estímulos que puedan distraer al peque durante la siesta, ayudándole así a su descanso.
2. Asociación de figuras:
Los niños asocian a los abuelos con momentos de descanso y relajación. Desde pequeños han pasado tiempo con ellos, han disfrutado de sus cariños y cuidados, y han aprendido a asociar su presencia con la tranquilidad.
3. Factores emocionales:
Los abuelos suelen tener una relación más tranquila y relajada con los niños. No tienen la misma presión que los padres por las obligaciones diarias, lo que les permite disfrutar más del tiempo que pasan con sus nietos y transmitirles una sensación de calma y seguridad.
El poder del «efecto manada» en las guarderías:
1. Los niños son seres sociales:
Los humanos somos seres sociales por naturaleza, y los niños se sienten más a gusto durmiendo junto a otros niños. En la guardería, se ven rodeados de otros peques que están durmiendo, lo que les ayuda a relajarse y conciliar el sueño.
2. Rutinas:
Las guarderías tienen rutinas fijas que favorecen el sueño. Los niños saben lo que les espera en cada momento del día, lo que les da una sensación de seguridad y les ayuda a prepararse para la siesta.
3. Imitación y contagio emocional:
Los niños son como esponjas, absorben todo lo que ven y escuchan. En la guardería, ven a otros niños que se acuestan tranquilos y se duermen rápido, lo que les anima a hacer lo mismo. Además, las emociones son contagiosas, y la calma y el relax que se respira en la guardería también les afecta a ellos.
4. Reducción de la ansiedad por separación:
Dormir con otros niños reduce la ansiedad por separación que algunos peques pueden sentir cuando están lejos de sus papás. Al ver que otros niños están tranquilos y seguros, se sienten más confiados y menos ansiosos.
¿Qué hacer si tu hijo no duerme bien la siesta en casa?
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2. Acude a un profesional del sueño si nada funciona.
Si has probado todos los consejos y tu hijo sigue teniendo problemas para dormir la siesta, no dudes en acudir a un profesional del sueño. Un especialista podrá evaluar la situación de tu hijo y darte las pautas personalizadas que necesita para mejorar su descanso.
Recuerda: El sueño diurno es tan importante como el nocturno para el desarrollo de tu hijo. ¡No lo descuides!